Revisando las preguntas que me llegan de todos vosotros, hay algunas que llaman especialmente la atención ya que muchas de ellas van directamente relacionadas con el sonido, el control de la respiración, los labios, etc. Tengo que decir que cada cuestión o mejor dicho cada problema se puede abordar de manera directa, pero la realidad de todo es que el origen está siempre en el mismo lugar.
Recientemente en una clase de un nuevo alumno, me expuso ese tema. Es decir, me pedía tener un sonido más redondo, con más cuerpo, más enfocado, etc. Pues bien empezando la clase, en las primeras notas en tan solo pasados 5 minutos el diagnóstico era clarísimo:
Falta de control en la respiración, y carencia de un hábito correcto respecto a ese tema.
Personalmente he investigado mucho en este tema, y una de las personas que me ayudó mucho fue Arnold Jacobs. Paradójicamente jamás he conocido a este impresionante músico. Tengo la certeza de que todo el material que nos dejó nos ha ayudado a todos, y todo lo que hoy día sabemos y practicamos sobre este tema de la respiración y mucho más proviene de él. Desgraciadamente nos dejó en 1998.
Con lo que he aprendido de su metodología más mi propia experiencia sumada a todo lo que he recibido de varios músicos de reconocido prestigio, a continuación comparto contigo un buen ejercicio que a mí me ha funcionado muy bien.
Te cuento:
Olvídate de la embocadura, la fuerza, la flexibilidad y las escalas por el momento. Si no consigues tener la respiración en su lugar o de forma controlada, nada va a estar en su sitio, y se va a sufrir de muchas y diversas maneras.
En más de una ocasión habrás notado que tus labios responden muy bien, y estarías horas y horas sin parar de tocar debido a ese buen estar que percibes. Tengo que decirte que en realidad es debido a que en ese momento se ha tenido una buena respiración. Si consigues que el aire fluya de forma relajada, constante y controlada, los labios van a estar en perfectas condiciones de trabajo.
¿Alguna vez no te ha pasado que has dejado de tocar por un corto período de tiempo, más o menos entre 3 días y una semana y después de eso para tu sorpresa todo funciona bien? Esto se debe a que has tenido algo de tiempo para perder algunos malos hábitos de respiración, y consecuentemente tocar más relajado de lo habitual. Bueno pues quédate con eso, ese sentimiento de bienestar, ya que es muy importante. Lo malo es que después de un período de inactividad seguramente vas a estar tocando unos 5 o 10 minutos más o menos bien, ya que seguro has perdido algo de forma por estar inactivo.
Con el siguiente y sencillo ejercicio, me gustaría ayudarte a que adquieras un buen hábito con respecto a la respiración. Este ejercicio es uno de los tantos que tengo en mi colección personal, algunos desarroyados por mí mismo y todos basados en Arnold Jacobs.
Siempre los realizo antes de empezar a tocar durante mi rutina diaria, y en varias ocasiones en medio de mi rutina.
Vamos allá
1- Busca tu metrónomo. Cualquier modelo que haga, tic, ping, clink,… no importa
2- Vamos a ponerlo en 60 (para mí esta es la velocidad ideal, es la que mueve el tiempo en nuestro mundo)
3- Respira durante un compás de cuatro pulsos (por la boca)
4- Expulsa el aire durante 1 compás de cuatro pulsos (por la boca)
5- Respira durante un compás de cuatro pulsos (por la boca)
6- Expulsa el aire durante 2 compases de cuatro pulsos (por la boca)
7- Respira durante un compás de cuatro pulsos (por la boca)
8- Expulsa el aire durante 3 compases de cuatro pulsos (por la boca)
9- Respira durante un compás de cuatro pulsos (por la boca)
10- Expulsa el aire durante 4 compases de cuatro pulsos (por la boca)
Supongo que te estarás haciendo una idea de a dónde va este ejercicio. Se trata de ver la cantidad de compases que puedes exhalar de una manera razonablemente controlada. Ya me dirás hasta donde puedes llegar, 4 compases, 7? tal vez 9? Deberías de asegurarte de que consigues expulsar todo el todo el aire de manera uniforme. Puedes probar a por ejemplo en pocos compases imaginarte que estás tocando en forte, y cuando trates de llegar a una mayor cantidad de compases imagínate que vas a tocar pianísimo.
Te sugiero que modifiques el compás, no hagas siempre lo mismo, prueba con un ¾ .
Ahora toca hacer lo mismo con el instrumento. Relájate, concéntrate y disfruta del momento. Para estar cómodos yo te sugiero que empieces por el registro medio, tal vez el Fa o el Sib para el trombón, aunque puedes elegir lo mejor para ti. Cada uno de nosotros tenemos distintos puntos para iniciar las notas tenidas, o largas.
Te recomiendo que realices este ejercicio al menos por una semana durante todos los días, después de eso seguro que encuentras algún resultado que siempre va a ser positivo. Me gustaría que me comentaras tus experiencias abajo en los comentarios.
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About Javier Colomer
Trombonista Internacional, solista, educador, apasionado de la música, amante del Trombón y de las nuevas tecnologías.
Ayudo a que la gente aprenda a tocar este fascinante instrumento.
Quisiera cual es la forma correcta de respirar.